Me invitaron a participar, con la escritora argentina Mariela Peña, en la Noche de las Librerías en Buenos Aires.
Al frente, la calle Corrientes sin autos y con cientos (miles) de personas escuchando charlas de escritores y comprando libros. Atrás, el Obelisco. Las palabras se quedan cortas. Jóvenes escuchando nuestras lecturas y leyendo sus propios textos, después charlé con varios, firmé libros, contesté preguntas. Todo esto me pasó esa noche. Y sigo sin despertarme del todo.