Publicado en 2011 por Ediciones de la Banda Oriental. Es un conjunto de cuentos que giran alrededor del tema del poder, el poder cotidiano y miserable; un amigo lo llamó, con acierto, «el poder del piojo» . Los presenté al Concurso Internacional de Cuentos Horacio Quiroga y gané el Primer Premio. Gran alegría, porque además de un premio en efectivo (como me hizo ver mi hermano, primera vez que gano algo de dinero con la escritura), se incluía también la publicación en la colección Lectores de Banda Oriental. Una tirada de 4.000 ejemplares para mi primer libro publicado. Tuve suerte además en que el prólogo lo hizo Jorge Albistur (también miembro del jurado) y la edición la corregí con Heber Raviolo. Una linda experiencia haber trabajado con los dos. La tapa es una ilustración de Durik.
Así empieza:
«Los fragmentos del ventanal cayeron al piso un segundo después de la rotura del vidrio que alteró la calma de la noche. Un rato antes había lloviznado, y los cristales mojados parecían joyas a la luz del farol de la esquina.
El traje azul del maniquí quedó al alcance de Gerardo. Hizo un ademán de acariciar la tela, que adivinaba suave, cuando el ruido penetrante de la alarma le perforó los oídos. Miró alrededor, no había nadie, o eso le pareció antes de alejarse a toda velocidad.»
