Arthur Conan Doyle fue un escritor inglés, e inventó el personaje del detective más conocido de la literatura, Sherlock Holmes. Misógino, excéntrico, solitario y brillante, su método deductivo se basa en la ciencia. El fiel amigo Watson lo acompaña en todos los relatos y novelas, y es casi tan popular como el detective. Irónicamente, Doyle no estaba orgulloso de sus novelas policiales y hubiera preferido ser más reconocido por sus otros libros. Pueden escuchar la columna completa en este audio: